viernes, 30 de mayo de 2008

Forma y libertad en la iglesia local - II

Cualidades necesarias para el liderato




  • Norma - Los ancianos y los diáconos deben tener cualidades específicas.


La Biblia no solo establece las posiciones de liderato en la iglesia, sino que además establece el tipo de persona que debe ocuparlas. Estas cualidades se presentan en dos lugares; 1 Timoteo 3:1-13 y Tito 1:5-9. Estos versículos describen cómo deben ser los ancianos y los diáconos. La iglesia no tiene derecho alguno para disminuir estos estándares para los oficiales de la iglesia, así como tampoco tiene derecho a elevar cualquier otro estándar como si estuviera al mismo nivel que estos que fueron establecidos por Dios mismo. Solo los estándares que aparecen en ambas referencias son absolutos.


En Tito 1:5 el apóstol Pablo dice "Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé". Así que aunque se habían establecido iglesias, las mismas no estaban completas porque no se habían ordenado ancianos con las cualidades apropiadas. De manera que Tito tenía la encomienda de llevar a las iglesias al nivel de la forma que debe tener una iglesia del Nuevo Testamento.




  • Norma - La iglesia local debe tomar la disciplina con mucha seriedad.


La situación descrita en primera de Corintios 5:1-5 es un ejemplo, entre muchos, donde se exige una disciplina basada en el principio de la pureza de la iglesia local en su doctrina y conducta. El Nuevo Testamento hace énfasis en esta pureza. Debe haber una diferencia bien marcada entre el "mundo" y la iglesia, y entre aquellos que son miembros de la iglesia y los que no lo son.


Pablo escribe "De cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aun se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la mujer de su padre. Y vosotros estáis envanecidos. ¿No debierais más bien haberos lamentado, para que fuese quitado de en medio de vosotros el que cometió tal acción? Ciertamente yo, como ausente en cuerpo, pero presente en espíritu, ya como presente he juzgado al que tal cosa ha hecho. En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesucristo, el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús."


La disciplina es importante en la iglesia. De acuerdo con esta norma, si una iglesia no imparte disciplina en las áreas de doctrina y conducta, no es una iglesia de acuerdo con el Nuevo Testamento.


El primer concilio de las iglesias




  • Norma - Hay lugar para la forma a un nivel más amplio que la iglesia local.


La forma no termina con la iglesia local. El capítulo 15 del libro de los Hechos muestra que estas iglesias no estaban completamente separadas unas de otras. Los representantes de las iglesias individuales, en un momento de crisis, se reunieron en Jerusalén en lo que se ha llamado el concilio de Jerusalén. El asunto era crucial, ¿cómo se salva una persona? (Hechos 15:1) De modo que los oficiales de las iglesias se reunieron formalmente para dilucidar este asunto.


Hubo muchas preguntas y mucha discusión. Luego hubo presentaciones de Pedro, Bernabé y Pablo. El versículo 13 parece indicar que hubo un moderador “Y cuando ellos callaron, Jacobo respondió diciendo: Varones hermanos, oídme.” Este moderador presidió la reunión y enmarcó la discusión dentro de la Palabra de Dios, la base de autoridad para la iglesia. La solución no fue simplemente algo que generaron ellos mismos, sino que estuvo basado en las Escrituras. De modo que aquí vemos una reunión, un moderador, una síntesis a la luz de la Palabra y una decisión.




  • Norma – Practicar los sacramentos del bautismo y de la cena del Señor.


Forma y libertad


Estas son las formas establecidas por Dios en el Nuevo Testamento. Estas formas no son arbitrarias, son la forma de Dios para la iglesia institucional y deben estar presentes en la iglesia de este siglo. Segundo, hay muchas áreas que se han dejado libres para que haya cambios. De manera que hay forma y hay libertad.


Cualquier asunto que el Nuevo Testamento no establece como norma para la iglesia provee espacio para que ella actúe libremente bajo la dirección del Espíritu Santo en el lugar y tiempo que le ha tocado vivir. En otras palabras, el NT establece unas condiciones de frontera, pero dentro de estas condiciones hay libertad para acomodar los cambios que surgen en diferentes lugares y tiempos.


Se pueden añadir otras cosas bajo la dirección del Espíritu Santo pero no deben tener carácter permanente. Estas pueden cambiar de acuerdo a la dirección del Espíritu Santo para responder a las necesidades del entorno. No ser capaces de cambiar bajo la dirección del Espíritu Santo, a medida que cambian los tiempos, es lamentable.




Free Hit Counter

Etiquetas:

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio